El bloqueo en la carretera nueva lleva cinco días. No ha permitido cuartos intermedios y aumenta la fila de vehículos varados

11 de junio de 2024, 8:39 AM
11 de junio de 2024, 8:39 AM

Los pobladores del municipio cruceño de Yapacaní cumplen hoy cinco días bloqueando la carretera nueva en la zona conocida como Cascabel, en el límite con Cochabamba. Las protestas se intensifican y los manifestantes anunciaron que radicalizarán las medidas de presión, incluyendo el cierre de las válvulas de la planta de producción Sirari, operada por YPFB Andina S.A.

Los comunarios demandan la construcción de un tramo de 30 kilómetros de asfalto que una Yapacaní con el Norte Integrado. Para ello, exigen la aprobación de un crédito externo de $us 35 millones por parte de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP).

Bloqueo en Yapacaní / Foto: Soledad Prado
Bloqueo en Yapacaní / Foto: Soledad Prado

Sin avances en el diálogo

Las esperanzas de los manifestantes de obtener una "señal" por parte del presidente de la Cámara de Diputados, Israel Huaytari, se desvanecieron ayer. Al no recibir respuesta, los comunarios anunciaron el cierre de las válvulas de la planta Sirari como medida extrema.

El diputado del ala arcista del MAS, Jerges Mercado, acusó a su colega Daniel Romas, leal al expresidente Evo Morales, de estar detrás del bloqueo. Según Mercado, Romas estaría recibiendo instrucciones desde el Chapare para obstaculizar la aprobación de leyes en el Legislativo.

El proyecto de ley para la construcción de la carretera se encuentra en fase de "informe de comisión" en la Cámara de Diputados y aún no ha sido aprobado. Mercado sostuvo que se requiere "voluntad política" de los legisladores de la región para aprobar el proyecto.

“No es cerrando la válvula o perjudicando la carretera y con eso van a conseguir que se logre la aprobación de leyes, es con el voto de los diputados”, dijo.

Bloqueo en Campo Víbora / Foto: Soledad Prado
Foto: Soledad Prado

Una demanda de 20 años

Los ciudadanos movilizados exigen el asfaltado de una carretera para vincular las zonas productoras de la región con la principal carretera que une a los departamentos de Santa Cruz y Cochabamba. Esta demanda data de hace más de 20 años.

La obra cuenta con una financiación de $us 35 millones por parte de CAF-banco de desarrollo de América Latina y requiere de la aprobación de la Asamblea Legislativa para su desembolso.

El corte de la ruta, que se encuentra a la altura del kilómetro 50 en la zona Cascabel, ha provocado largas filas de vehículos, especialmente de transporte internacional de exportación y de cisternas para la provisión de diésel.